10 razones por las que las personas mayores pierden el apetito

La pérdida de apetito es común en los ancianos.

Muchas personas mayores se resisten a las comidas o simplemente se niegan a comer debido a la pérdida de apetito.

Se trata de una cuestión que es necesario abordar, ya que las personas mayores, en particular, necesitan una nutrición equilibrada para mantenerse lo más sanas y activas posible.

Pero ¿cómo convencer a alguien que no tiene apetito para que coma? ¿Y por qué las personas mayores pierden el apetito en primer lugar?

Para ayudarle a entender por qué puede suceder esto, explicamos algunos de los problemas de salud que pueden provocar pérdida de apetito.

En primer lugar, descartar problemas de salud graves o efectos secundarios de la medicación.

Si su ser querido pierde repentinamente el apetito, es importante hablar con su médico. Puede ser necesaria una visita para descartar problemas de salud graves o efectos secundarios de la medicación.

Algunas enfermedades graves provocan cambios en el gusto y el apetito, entre ellas:

• Enfermedad de Alzheimer y enfermedad de Parkinson
• Trastornos de la tiroides
• Infecciones de boca y garganta o enfermedades de las encías
• Trastornos de las glándulas salivales

Los efectos secundarios de algunos medicamentos , como sequedad de boca o sabor metálico, pueden cambiar el sabor de la comida o del agua, lo que también puede causar pérdida de apetito.

10 razones de pérdida de apetito en las personas mayores

Si su pérdida de apetito no está causada por un problema de salud o un medicamento, aquí hay otras 10 razones por las que alguien podría no querer comer.

1. Falta de ejercicio

El ejercicio y las actividades regulares ayudan a aumentar el apetito. A veces es necesario abrir el apetito antes de poder comer.

2. Deshidratación

Estar deshidratado puede causar pérdida de apetito.

Muchos adultos mayores no consumen suficientes líquidos y se deshidratan más fácilmente debido a cambios relacionados con la edad o medicamentos.

3. Falta de rutina

Adoptar una rutina diaria en la que las comidas se consuman a la misma hora todos los días puede ayudar a que su cuerpo se sienta listo para comer en esos momentos.

4. Incapacidad para preparar comidas

Las personas mayores que viven de forma independiente pueden no comer adecuadamente porque preparar sus propias comidas se vuelve muy difícil.

5. Pérdida de sabor

6. Dificultad para masticar, tragar o comer de forma independiente.

Si comer se ha vuelto demasiado difícil o desagradable, muchas personas mayores simplemente no quieren comer.

Estos problemas pueden ser causados ​​por:

• Envejecimiento normal (desgaste del cuerpo)
• Problemas dentales
• Medicamento
• Tratamientos médicos, como la cirugía.
• Accidente cerebrovascular, demencia, esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson u otras afecciones de salud.

7. Sensibilidad a los olores

A veces las personas desarrollan una sensibilidad al olor de ciertos alimentos que puede provocarles náuseas o incapacidad para comer.

8. Depresión o soledad

La depresión afecta a 1 de cada 10 personas mayores y con frecuencia puede causar pérdida de apetito.

A muchas personas también les puede disgustar la hora de comer porque no tienen con quién comer, lo que intensifica los sentimientos de soledad.

9. Pérdida de control

Cuando dependes de otras personas para todo, es fácil sentir que estás perdiendo el control de tu propia vida.

A veces, no poder elegir qué comer hace que alguien no quiera comer.

10. Las horas de comida son desagradables

Si la hora de comer se ha convertido en un momento de desacuerdos o discusiones sobre cómo comer, la persona puede asociar la comida con situaciones desagradables y evitarlas.

Fuente: https://dailycaring.com/why-do-seniors-lose-their-appetites/